Apodado como “el monstruo de la canchita”, Bernardo Guanuco (50), acusado de abusar y mantener cautiva a su hija de 25 años, deberá declarar hoy ante el juez de Instrucción Formal 6, José María Alvarado Solá.

Cabe recordar que el hombre fue apresado en las últimas horas, en la zona este de esta ciudad, por el personal de la División de Lucha contra la Trata de Personas. El caso causó un masivo repudio a nivel nacional e internacional, tras haber sido difundido en la edición de ayer de este matutino.

Por ese motivo, pese a la indignación que generó la noticia, las expectativas están puestas en las declaraciones indagatorias del acusado ante el magistrado a primera hora de hoy, en la Ciudad Judicial.

Las investigaciones de los efectivos comenzaron momentos después de que una vecina de la víctima, cuya identidad se reserva, radicara una denuncia en la cual aseguró que la joven sufría abusos sexuales por parte de su padre desde que era adolescente, y que por esas violaciones la damnificada tuvo cuatro hijos (de 11, 8, 6 y 2 años).

Luego los sabuesos constataron que los hechos denunciados se llevarían a cabo en una vivienda ubicada en la calle Juan XXIII 1390, donde funciona un taller mecánico, y en otro inmueble colindante -el número 1320-. Allí la damnificada residía con su padre y también con los pequeños.

Al ser consultados por El Tribuno, diferentes vecinos aseguraron que el sujeto sometía a su hija desde pequeña y que los menores son producto de una relación incestuosa. También se supo que los agentes sanitarios del centro de salud de villa Primavera tenían conocimiento del hecho.

Luego de ser apresado, Guanuco, también apodado “Flaco”, quedó alojado en Alcaidía Judicial, donde permanece detenido.

Otro hecho similar

Sin dudas el indignante hecho causó conmoción tanto a nivel provincial como nacional, y el caso ya fue comparado con el de Armando Lucero, conocido como el “Chacal de Mendoza”.

El hombre, que falleció en prisión en mayo de 2010, fue acusado de violar reiteradamente a su hija, con quien tuvo siete hijos.

El señalado fue detenido el 8 de mayo de 2009 en su casa de calle Patricias Mendocinas de la ciudad de Mendoza después de que la víctima, de 35 años, se animó a denunciar ante la Justicia los aberrantes abusos a los que fue sometida.

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