Otra agresión que se convierte en la frutilla del postre de una campaña electoral muy agresiva. Ayer el legislador provincial de Tucumán y referente de La Cámpora Jesús Salim denunció que su casa, de la ciudad de Famaillá, fue baleada durante la madruga por desconocidos y vinculó la agresión con “cuestiones políticas”.

Pero el hecho se ayer se sumaría a otro reciente, ya que el domingo último, horas antes del inició del las elecciones legislativas nacionales, varias personas, a las que Salim no pudo identificar, intentaron quemar su automóvil. A ese ataque también lo consideró “político”.

“Los vecinos escucharon disparos, salieron y se dieron con que habían atacado mi casa”, manifestó.

La casa, situada en el barrio 120 Viviendas de la ciudad de Famaillá, 30 kilómetros al sur de la capital provincial, presentaba tres impactos de bala calibre nueve milímetros.

Salim está duramente enfrentado con el intendente de Famaillá, Juan Orellana, también kirchnerista, y con el hermano mellizo de este, el legislador José Orellana.

Estos cuestionaron con dureza la postulación de la esposa de Salim, Mabel Carrizo, como candidata a diputada nacional en tercer término de la lista del Frente para la Victoria.

Carrizo quedó al límite de acceder a la banca de la Nación, ya que el FpV logró dos escaños el domingo, aunque todavía no estaba descartado que finalmente la logre, en caso de que el ministro del Interior de Tucumán, Osvaldo Jaldo, en segundo término en la nómina, decida continuar en su cargo.

“Estoy preocupado”, ya que “primero fue el intento de prenderle fuego a nuestro auto el domingo y ahora lo de esta madrugada. Sentimos mucha impotencia y creemos que esto está vinculado con lo político, porque no tenemos problemas con particulares”, sostuvo el dirigente kirchnerista.

Repudio generalizado

Dirigentes políticos del oficialismo y la oposición, funcionarios y organismo de derechos humanos repudiaron el atentado sufrido por Salim y su esposa ayer a la madrugada en Tucumán, mediante un comunicado conjunto.

""Entendemos que este no es un ataque solamente contra dos militantes políticos, sino contra toda la democracia, puesto que reproduce los más atroces y cobardes métodos de los grupos de tareas de la dictadura militar'', indicó el texto.

""Exigimos a las autoridades locales el esclarecimiento inmediato de estos hechos y las penas correspondientes a los autores materiales e intelectuales'', agregó el documento.

Entre los firmantes se encuentran el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Martín Fresneda, el subsecretario de Promoción del área, Carlos Pisoni, y el diputado nacional Marcelo Santillán, entre otros.