Molestia. Eso sintieron los concejales ayer con los dichos de monseñor Dante Bernacki en un medio radial. Y se lo hicieron saber.

La mayoría de los ediles le contestó al monseñor. No solo se tomaron el tiempo para responderle, sino que durante la sesión pasaron el audio radial con las declaraciones del religioso. A partir de allí comenzó la batería de respuestas. Bernacki se refirió en una entrevista al desempeño de los concejales cuando fue consultado sobre la prohibición de fuegos artificiales durante las celebraciones religiosas, proyecto cuya autoría corresponde a la concejal Socorro Villamayor. “Me parece que están mirando a cualquier cosa menos a las prioridades de la gente en este momento. Es decir están preocupados por las bombas y los cohetes que puedan tirar en la procesión la gente que está exteriorizando un poco su alegría”, dijo Bernacki en la entrevista. Pero el religioso fue más allá aún. “¿Sabe cuál es la impresión que me da? Que son una fábrica de hacer ordenanzas que nadie cumple, nadie controla, es decir van a hacer la ordenanza, qué linda la ordenanza y después si te he visto no me acuerdo”.

El primero en responderle al monseñor fue el edil Martín Avila, del Frente para la Memoria y Movilización (FpMM). “Me llamaron la atención sus dichos. Sentí que usó términos muy fuertes contra el Concejo Deliberante”, dijo, y le retrucó: “Acepto las críticas pero hay que ser respetuoso”. Más duro fue el presidente del cuerpo, Tomás Salvador Rodríguez, quien señaló que “son lamentables las declaraciones del padre”, y lo tildó de “cuadro político dentro de la iglesia”. Y para finalizar marcó: “Le pido al padre que se acerque a Dios”. Lo cierto es que el padre Bernacki aludió a la cantidad de ordenanzas que se sancionan pero que carecen de efectividad. Puso como ejemplo los edificios en el centro que se construyen sin respetar las normas. De modo que les pidió a los concejales que prioricen los problemas que afectan a los vecinos de los barrios. La mayoría aludió a que el control de las normas corresponde al Ejecutivo municipal. Y la molestia contra el padre también tiene raíz en que durante el 2012 se cuestionó el rol de los ediles, particularmente cuando se armó un extenso debate para cambiar de nombre a la avenida Virrey Toledo, ahora Bicentenario de la Batalla de Salta, y el debate por el impuestazo no se discutió con la misma profundidad.

El proyecto polémico

El proyecto que generó la polémica, y sobre el cual se explayó tanto monseñor Dante Bernacki como casi todos los concejales, contiene varias medidas, además de la prohibición del uso de fuegos artificiales en fiestas religiosas.
Propone la prohibición de los corsos en la zona del macrocentro. Principalmente se refiere al anillo que forman las avenidas Bicentenario de la Batalla de Salta, Reyes Católicos, Independencia y la calle Olavarría.
Además, establece que las manifestaciones religiosas (procesiones) deberán ser comunicadas al municipio cada vez que se realizan para que éste establezca los dispositivos de seguridad necesarios con el fin de que los feligreses no sufran ningún accidente. La iniciativa no se trató aún.
 

LAS OPINIONES

Que dejen de perder tiempo, eso es lo que tienen que hacer. A ver concejales, pónganse las pilas, el pueblo está pasando por otro lado en este momento y ustedes están discutiendo que si la bomba o no la bomba. ¿Cuántos chicos quemados hay en las fiestas? ¿Quién controla eso?

Tomás Rodríguez “Son lamentables las declaraciones del padre. El padre Bernacki es un cuadro político dentro de la Iglesia. No puede estar desinformado. Hay que respetar la institucionalidad. Le pido al padre que se acerque a Dios”.

Socorro Villamayor “Al padre no lo voy a ofender. El hizo sus manifestaciones y lo respeto. Además le tengo un cariño. Si él considera que hay otros temas prioritarios, entonces tenemos los concejales que reflexionar. Es cierto que tiene que haber un control mejor”.

Martín Pérez Estrada “Hay cosas en las que coincido con el padre. Sí hay una falta de control de la aplicación de las ordenanzas. El Ejecutivo no controla porque, o no sabe, o no puede. Es responsabilidad de la Municipalidad el control, no de los concejales”