“Si bien la historia nos separó, nada ni nadie puede descuajar nuestra historia”, dijo el presidente de Uruguay, José Mujica, en su audición semanal de radio. Dijo que los uruguayos nacieron “en la misma placenta de los pueblos argentinos. Si bien la historia nos separó, nada ni nadie puede descuajar nuestra historia. Pertenecemos al grupo de esos pueblos y tenemos que andar bien con toda la humanidad, pero en primer termino con los pueblos que nacieron en la primera matriz”, sostuvo.

El jefe de Estado fue protagonista de un escándalo diplomático con la Argentina. Sucede que durante una conferencia de prensa dijo “esta vieja es peor que el tuerto” en alusión a Cristina Kirchner. Las palabras fueron captadas por micrófonos que estaban abiertos cerca del mandatario.

“Debería pedir disculpas”

El ex mandatario uruguayo Julio María Sanguinetti (1985-1990 y 1995-2000) consideró hoy que el presidente de su país, José Mujica, debería “pedir disculpas” para “cerrar este episodio penoso”, en referencia a los dichos sobre su par argentina Cristina Kirchner y su esposo y antecesor, Néstor.
“El tema es cerrar el episodio cuanto antes, si no va a seguir rebotando y no va a ser bueno para nadie”, planteó uno de los dirigentes históricos del Partido Colorado.

Sanguinetti fue consultado sobre las palabras de Mujica, que ayer, durante un acto oficial, mientras los micrófonos de la transmisión televisiva estaban abiertos, señaló que “esta vieja (por Fernández) es peor que el tuerto”, en alusión a Kirchner.
“Mujica apostó mucho a la relación con la Argentina luego de la gran distancia entre Kirchner y (Tabaré) Vázquez. Al entrar, con buen criterio dijo: vamos a cambiar, fue a la Argentina, trató de recomponer la relación y lo hizo bien, pero a partir de allí no se manejó bien y tampoco encontró una respuesta adecuada, generosa”, repasó Sanguinetti.

Luego abundó: “Mujica fue frustrándose porque las cosas no salieron bien, no hubo respuestas positivas y eso le fue generando una sensación de frustración que expresan esos dichos. Ahora, se arregla pidiendo disculpas”.

“Tenemos mucho respeto institucional por nuestro presidente, yo lo tengo y no me gusta hacer demasiados comentarios, pero es un episodio penoso que se resuelve pidiendo disculpas. Cuando uno comete un error, que no es personal, sino que compromete al país, hay que pedir disculpas, allanarse y bueno, ver cómo se transita una situación así, no hay otro camino”, planteó.

Sobre el Mercosur, uno de los puntos de fricción entre Buenos Aires y Montevideo, opinó que “está en un muy mal momento, porque no ha avanzado la coordinación macroeconómica. Estamos todos con tipos de cambio distinto, con una situación muy distorsionada”.