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Las partes en la última reunión no coincidieron y en la discusión salarial mantienen sus posiciones sin lograr un acercamiento.
2 DE Mayo 2013 - 22:01
La UOM inició la discusión con un pedido de incremento salarial del 35 por ciento, pero luego lo rebajo a 25 por ciento
La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) y las cámaras patronales del sector volvieron ayer a fracasar en las negociaciones paritarias del 2013, por lo que el Ministerio de Trabajo dispuso un cuarto intermedio hasta el lunes.
Fuentes de la cartera laboral indicaron que las partes mantienen sus posiciones sin lograr un acercamiento.
La cartera conducida por Carlos Tomada trató de convencer a los delegados paritarios de la UOM para que acepten un incremento salarial que sería menor a la inflación medida por consultoras privadas.
El martes pasado fracasó la gestión de intermediación llevada a cabo por la cartera de Trabajo, que había sugerido un incremento de 24 por ciento en dos cuotas, con dos sumas fijas de 680 pesos.
Según dijeron fuentes empresariales, la cartera laboral intermedió con una propuesta de incremento del 15 por ciento en abril, más otro 9 por ciento en julio, de forma no acumulativa.
La propuesta se completa con dos sumas fijas, una en noviembre de 682 pesos y otra de 687,5 pesos en enero del año próximo. Los empresarios nucleados en la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (Admira) y de la Cámara de la Pequeña y Mediana Industria (Camina) mantenían una nueva reunión por separado con vistas al próximo lunes.
Se trata de la cuarta reunión paritaria que fracasa, ante la inquietud del gobierno que pretende que la negociación con el sindicato conducido por el titular de la CGT oficialista, Antonio Caló, sirva de ejemplo para el resto.
En rigor, Caló inició la discusión en forma privada con las empresas con un pedido de incremento salarial del 35 por ciento, pero luego lo rebajo a 25 por ciento.
A partir de allí, la posición del sindicato se mantuvo firme en torno del reclamo de 25 por ciento, mientras que las empresas pasaron de ofrecer 18 por ciento a estar cerca de la aceptación del 24 por ciento sugerido por Tomada.
“Si se avienen a lo que pedimos, hay acuerdo ya. Si no es el 25 % vamos a la pelea, lo que más les duela, paro, movilización o paralización de actividades”, advirtió a la prensa el secretario adjunto de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Juan Belén, a minutos del inicio de la reunión en el Ministerio de Trabajo.
Para el Gobierno es una paritaria clave, ya que pretende que lo acordado sea una referencia para el resto de las negociaciones salariales.
Trabajadores de la Alimentación en estado de alerta
El consejo directivo de la Federación de Trabajadores de la Industria de la Alimentación en representación y con el mandato expreso de las 35 filiales de todo el país, declaró el estado de alerta y movilización de todos los trabajadores del sector y sus cuerpos orgánicos.
Esta resolución se toma ante el vencimiento de la escala salarial en el mes de abril y la insuficiente respuesta por parte del sector empresario ante los reclamos por incrementos en las nóminas salariales que permitan a los trabajadores de la alimentación acceder a una retribución digna.
La medida, acompaña peticiones de otros gremios que buscan una recomposición salarial que permita un fortalecimiento del salario en un cuadro de inflación permanente y que provoca serios desajustes en el bolsillo de los trabajadores.
Cabe destacar que el gremio se encuentra negociando un porcentaje superior al ofrecido por los empresarios, que es del 19%, que por otra parte se pagaría en cuotas.
Las razones
El sector laboral argumenta que ese porcentaje es insuficiente con relación a los precios de los artículos de la canasta familiar.
En ese sentido los dirigentes destacan que “se han planteado en las negociaciones las necesidades de los trabajadores con total claridad y responsabilidad, teniendo en cuenta que los permanentes aumentos de los precios de los productos de la canasta familiar, alimentos y servicios han disminuido el poder adquisitivo de los salarios de los trabajadores de la alimentación, deteriorando su calidad de vida y la de sus familiares. Ante la falta de respuesta de los representantes empresarios, la Federación, en consulta con sus distintos gremios adheridos que agrupan a los afiliados a lo largo del país, decidió el 29 de abril pasado declarar el estado de alerta y movilización.
En virtud de lo expuesto y luego de las negociaciones, el Consejo Directivo de la F.T.I.A considera que la oferta empresaria del 19% en cuotas, además de ser insuficiente, responde a una maniobra especulativa para preservar ganancias para las empresas generadas en sucesivos años en el marco de una economía con altos índices de crecimiento y consumo.