En el caos que reina hoy en el norte, principalmente en el departamento de Orán, los bagayeros tienen un protagonismo importante.

Al enfrentamiento con gendarmes que provocó la muerte de uno de los vendedores, Afip y Aduana decidieron reforzar los controles a la entrada de los bagayeros en Aguas Blancas. El fin es evitar que el comercio ilegal llegue hasta Orán.

“Lo que nos interesa es determinar la mecánica que hoy tiene Orán. Los bagayeros entran a esa ciudad con mercadería luego de cruzar la frontera, entonces lo que buscamos es un corrimiento, empezar a controlar en Aguas Blancas para evitar que ingresen a la ciudad. Para esto vamos a articular fuerzas con el Ministerio de Seguridad”. Se estima que en Orán hay alrededor de 6.000 bagayeros, es decir, vendedores que traen la mercadería luego de cruzar la frontera en dirección a Argentina. Afip manifestó no tener un número exacto de la cantidad de dinero que mueven los bagayeros, pero Resnick admitió que se trata de “mucho dinero”. Tras la problemática con Gendarmería hubo un pedido de distintos representantes de bagayeros para que se contemple la dura situación que atraviesan en ese departamento respecto a desempleo y poca actividad económica. Lo cierto es que Resnick Brenner expresó que “tenemos una función definida y como organismo no podemos abstraernos de hacer un control aduanero. Hoy las fronteras son tierra de nadie, motivo por el que el narcotráfico hace estragos”.

Trabajo infantil

A pocos días de que la ministra de Derechos Humanos sostuviera que el hecho de que una nena venda bollos no significa trabajo infantil, Resnick dijo que “muchas veces se dice que es un tema cultural, y no es así. Lo único que tienen que hacer los niños es ir a la escuela y bajo ningún modo ni caso se puede permitir que trabajen”. En lo que va del año 2013 son 6 los casos detectados por Afip sobre trabajo infantil, según dijo el organismo a El Tribuno.