Los secretarios generales de la CTA de los Trabajadores y de la CTA Autónoma, Hugo Yasky y Pablo Micheli, confirmaron hoy el inicio del proceso de reunificación de la central sindical y anunciaron que se sumarán a la marcha que hará la CGT el próximo 7 de marzo.

Esto se resolvió luego de un plenario realizado en la sede de la CTA de los Trabajadores, con la presencia de autoridades de las dos centrales, quienes acordaron desarrollar una unidad en la acción de aquí en más y concretar la reunificación el año próximo, cuando vencerán los actuales mandatos de Yasky y de Micheli.

Después de varios años de enfrentamientos y de cruzar duras acusaciones tras la fractura de la CTA en 2010, los dos secretarios generales posaron abrazados y sonrientes para las fotos, coronando así el acercamiento que habían puesto en marcha el año pasado.

Ante los periodistas, Yasky y Micheli también anunciaron un paro para fines de marzo, que esperan que sea junto a la CGT, que ya tiene prevista una huelga para esa fecha.

La unidad en la acción que acordaron incluye también la participación de las dos CTA en el paro y movilización por el Día de la Mujer del 8 de marzo y en la marcha del 24 de ese mes por el Día de la Memoria.

De todos modos, la reunificación anunciada no sería completa, ya que un importante sector de la CTA Autónoma, liderado por Víctor de Gennaro y el líder de ATE Nacional, Hugo Godoy, rompió lazos con Micheli meses atrás y se mantuvo al margen de las negociaciones con Yasky por la unidad, por lo que se desconoce cuáles serán sus próximos pasos.

"La idea es llegar, cuando se terminen los mandatos mio y de Pablo (Micheli), a una conducción unificada en 2018", precisó Yasky en la rueda de prensa en la sede de la central de la calle Piedras al 1.000.

Yasky y Micheli hicieron los anuncios flanqueados por dirigentes de ambas centrales, entre ellos Roberto Baradel, Pedro Wasiejko, Daniel Catalano, José Rigane, Edgardo Depetri, Roberto Pianelli y Francisco Nenna.

Ambos secretarios generales justificaron la reunificación en la necesidad de "enfrentar el ajuste y las políticas" del Gobierno de Mauricio Macri y adelantaron que "el camino Iniciado" para la unidad continuará con otro plenario previsto para el mes próximo.

"Necesitamos que termine esta sangría de despidos, todas las semanas hay despidos. Además en el Gobierno quieren poner un techo del 17% a las paritarias, como se ve el caso de los docentes y también en los bancarios", fustigó Yasky.

Micheli, por su parte, apuntó contra el Presidente por el acuerdo con su padre Franco Macri sobre la deuda del Correo Argentino con el Estado: "Es obsceno y una vergüenza que digan que no tienen plata para los aumentos de los docentes, los estatales y los jubilados, mientras perdonan millonarias deudas a sus familiares", se quejó.

Yasky, aliado al kirchnerismo, y Micheli, opositor a ese espacio político, quedaron duramente enfrentados años atrás y las escandalosas elecciones en las que se midieron en 2010 decretaron la ruptura de la central, pero el rechazo de ambos a las políticas de la gestión macrista volvió a ubicarlos en la misma vereda.

El otro factor que propició el acercamiento entre ambos fue la dura disputa que se abrió entre Micheli y su histórico mentor De Gennaro, que dejó al secretario general en inferioridad numérica dentro de su propia central, con lo cual apostó a una alianza con Yasky como salida a ese problema.