Vecinos colindantes al asentamiento de Parque La Vega no quieren más postergaciones sobre la usurpación de un espacio público de esa barriada de la zona sur de la capital salteña que lleva cinco meses. La gota que rebalsó el vaso fue una conexión clandestina que hicieron ayer personas del asentamiento sobre un caño maestro de agua que abastece al barrio Scalabrini Ortiz, que se quedó sin presión en las cañerías domiciliarias.

Tras ese hecho, organizaron mediante las redes sociales una manifestación que se realizará el martes próximo, desde las 10, en la plaza central de San Remo. La modalidad de la protesta será con bocinazos desde vehículos y cacerolazos desde las viviendas de los barrios afectados.

Apuntan contra el gobernador Gustavo Sáenz y el fiscal Pablo Paz, quien desde mayo dirige una mediación entre los asentados y el Gobierno para intentar encontrar una vía alternativa al desalojo. Evidentemente, aún no la halló.

Antes de la rotura ilegal en la red de agua, los vecinos de la zona sur ya venían con los ánimos caldeados por el corte total durante cinco horas que hicieron las familias del asentamiento el jueves pasado en el sector de la rotonda del Limache. Los asentados también están indignados ante la falta de respuestas al degradante déficit habitacional que padecen.

El caño

La rotura en el caño maestro de agua potable fue advertido por vecinos del barrio Scalabrini Ortiz, colindante a Parque La Vega, quienes en el mediodía de ayer empezaron percibir una notoria baja en la presión del servicio por el que pagan.

Desde Aguas del Norte hicieron una denuncia penal por el hecho en la comisaría de San Remo. El sector corresponde al fiscal penal 6, Horacio Córdoba Mazuranic, quien, según afirmaron desde la empresa estatal al cierre de esta edición no intervino, por lo que los operarios no pueden ingresar al asentamiento para componer el daño.

“Es ilegal esa conexión, es como que están robando el agua. Se hizo una denuncia al fiscal Córdoba y todavía no tomó intervención y la Policía no quiere actuar porque no tiene las instrucciones del fiscal”, explicó a El Tribuno el presidente de Aguas del Norte, Luis María García Salado.

“Estamos dejando en claro que no existen las garantías para que la empresa Aguas del Norte pueda arreglar esa parte del acueducto porque no hay seguridad”, advirtió.

En la denuncia presentada en la comisaría 15 de San Remo, los representantes legales de la empresa estatal dejaron constancia del “intento de conexión clandestina realizado por los usurpadores del asentamiento Parque La Vega, los mismos rompieron y dañaron el sistema de agua potable afectando a los usuarios de Aguas del Norte de toda la zona, lo que genera baja presión en el servicio y el enojo de los usuarios”.

Según pudo conocer este diario, vecinos de Scalabrini Ortiz también iban a radicar sus denuncias penales.