Gimnasia y Tiro sudó la gota gorda en Campo Santo, por momentos lo padeció, lo invadió el suspenso hasta el final y terminó ganando por un score muy reñido, tal vez demasiado para el contexto del partido, muy a pesar de ser claramente superior a su rival.

Y como le ocurrió hace ocho días frente a San Antonio, en su debut en el Regional Amateur, tuvo un arranque que se asemejaba al de una tromba, pero sintió el desgaste con el correr de los minutos y terminó poniendo en riesgo su victoria en el tramo final.

Sin embargo, el albo, que ayer se impuso por 2 a 1 a Redes de la Patria en Campo Santo, tiene motivos para respirar aliviado, por el momento, en el certamen de la cuarta categoría, porque dosificando esfuerzos, y aún con una -por momentos- alarmante carencia en la definición, le alcanza para sembrar un pequeño invicto de dos partidos y ser puntero de la Zona 5 de la Región Norte, con puntaje ideal, con dos triunfos al hilo.

Gimnasia arrancó como un vendaval, presionando en todos los sectores de la cancha, ejerciendo un dominio que dejaba la sensación que el primer gol estaba al caer desde el crepúsculo del juego. Y esta percepción general se confirmó a los 17’, cuando Luciano Herrera capitalizó una asistencia de su socio Juan Manuel Perillo, con el que comienza a entenderse, en una acción que tuvo se concepción en un gran desborde de Rubén Villarreal. El oriundo de Ledesma definió con oficio y marcó el 1 a 0, altamente merecido hasta entonces.

Sin embargo, el elenco millonario, que pudo haber incrementado la cifra con una acción increíblemente dilapidada por Perillo en soledad, en la primera desconcentración en el fondo fue a buscarla adentro, en el gol de Franco Oña (28’).

Pero la reacción del albo no tardó en llegar y antes del cierre del primer tiempo apareció otra vez Lucho para aprovechar una genial habilitación de lujo de Perillo y poner justicia con el 2-1 que a la postre terminó siendo el definitivo.