En épocas de pandemia y sin fútbol suelen aflorar polémicas por declaraciones relajadas de futbolistas a través de las redes sociales. Es el caso de la confesión que hizo Sergio Agüero sobre Lanús, que derivó en un escándalo mediático con la respuesta categórica del club de Primera División. 

Todo comenzó cuando el Kun confesó ayer que fue rechazado en una prueba en Lanús antes de recalar en Independiente y de su exitoso paso por Europa. En una divertida anécdota que contó a sus seguidores de la plataforma Twitch, el delantero reveló que realizó una prueba en el granate a los “ocho u nueve años”, donde lo pusieron de cuatro, cuando él se había presentado para jugar de diez.

“¿Te animás a jugar de cuatro?’, me dijeron. Yo estaba acostumbrado a jugar arriba en el barrio, pero ya estaba ahí y dije ‘bueno agarro la pelota, voy para adelante y gambeteo’”, contó.

Según narró el Kun, no pasó la prueba por ser “chiquito” y la idea del entrenador que estaba a cargo era reclutar a defensores grandotes. “La cosa es que no quedé en Lanús porque era chiquito. Y sigo siendo chiquito, el tema es que se equivocaron de puesto”, disparó el Kun.

Pero la respuesta oficial de Lanús no se hizo esperar y trataron de mentiroso al goleador histórico del Manchester City.

“Es mentira que haya venido a una prueba en Lanús. El jamás pisó el club”, aseguró Carlos Barbagallo, presidente del fútbol infantil de Lanús. “En la categoría 88 -la misma que el Kun- estaban el Laucha Acosta y Sebastián Blanco, que eran la mitad de Agüero, y Germán Cano, que como mucho era igual”, lo cruzó el directivo.