Los trabajadores que día a día necesitan salir a la calle para ganarse el salario, con o sin pandemia mediante, cuestionaron la medida que les impide el acceso al transporte público de pasajeros a primera hora de la mañana. Distintos referentes coincidieron en que el regreso a clases presenciales es una prioridad pero consideran que, con diálogo y previsión, se podrían haber tomado medidas que no afecten a las actividades económicas que ya vienen golpeadas por la crisis y a sus trabajadores.

El malestar surgió luego de que el Comité Operativo de Emergencia (COE) dispusiera que, para evitar que las unidades colapsen, entre las 7 y las 8.30 solo pueden subir al ómnibus quienes van a la escuela y personal de actividades esenciales, como salud, seguridad, medios de comunicación, farmacias, estaciones de servicio y transporte. Esto regirá desde el lunes, cuando comienza el ciclo lectivo.

El titular de la Cámara de Hoteleros, Gastronómicos y Afines, Eduardo Kira, lamentó la medida oficial y aseguró que perjudica al sector que representa. En diálogo con El Tribuno, cuestionó que "los gastronómicos somos a veces monedas de cambio en todas las determinaciones que se toman, las cuales nos afectan negativamente".

"Con el inicio de las clases era sabido que iba a haber una explosión de movimiento, siempre sucede y este año no iba a ser la excepción", remarcó para dejar en evidencia la improvisación de la medida, tomada a horas del inicio de clases.

Kira expuso que la decisión "afecta mucho a los gastronómicos que trabajan prioritariamente con el desayuno". El referente del sector gastronómico y hotelero expuso que mantuvo un encuentro con el titular de Saeta, Claudio Mohr. "Fue una reunión muy buena, el funcionario se mostró muy abierto a mis propuestas, pero quedó en eso y nada más", dijo. Detalló además que una de las propuestas que le acercó fue que "cada un determinado número de coches exclusivos con personal de salud, seguridad, educación y alumnos, pase uno al que puedan subir los trabajadores de otros sectores".

Otra de las propuestas, según indicó, fue que se busque la manera de crear un sistema de transporte para los sectores privados con las combis que las agencias de turismo tienen en desuso, que son la mayoría por la retracción que tuvo esa actividad.

"No renegamos de tener que cuidarnos y coincidimos en que la prioridad es la salud, la educación y que los chicos puedan ir a la escuela", dijo Kira. Sin embargo, agregó: "Pero también hay que cuidar el trabajo, somos uno de los países con peores índices económicos del mundo porque todas las medidas que se toman atentan contra el trabajo".

Kira reconoció que "nunca se puede satisfacer a todos, pero hay que buscar una manera porque esto (la restricción al uso del transporte de pasajeros) se paga con el trabajo de muchísima gente".

"Para cada dificultad puede haber una solución, entonces veamos la manera de agotar posibilidades. Hace días sabemos que vuelven las clases, ¿por qué no se previó esto", cuestionó.

Finalmente, Kira puso el foco en que "esto encarece el costo de trabajo de la gente porque todo el mundo entra a trabajar entre las 8 y 9 de la mañana. Estamos frente a otro golpe al bolsillo del trabajador, que se podría haber evitado si pensaban una estrategia".

"No hay ninguna medida que se tome que no afecte al sector gastronómico y hotelero, pareciera que estamos en la mira, cuando nosotros en realidad somos parte de la solución y no del problema", concluyó.

Más sectores afectados

Por su parte, desde el sector de las trabajadoras de casas particulares manifestaron que la restricción del horario de transporte público a partir del lunes las afecta, ya que la gran mayoría va en colectivo a los hogares donde trabajan. Los comerciantes, en tanto, deberán reorganizarse y adaptarse al horario en que puedan llegar los trabajadores.

Muchas trabajadoras de casas particulares deben presentarse temprano para acompañar a los hijos de sus empleadores a la escuela o cuidarlos cuando sus padres se van a trabajar. Algunas deben tomar dos colectivos para trasladarse en el área metropolitana.

En contraste, desde la Cámara de Comercio aseguraron que esta medida fue consensuada con ellos y que cada comerciante se organizará con sus empleados para cubrir la franja horaria en la que trabajan.

En el ámbito de la Provincia y de la Municipalidad, en tanto, se modificará el horario de los empleados que se trasladan en colectivo. En el Poder Judicial se evaluará caso por caso.

Según manifestaron desde la agrupación "Unidas podemos lograrlo", son alrededor de mil las trabajadoras de casas particulares agrupadas en Salta capital y todas usan transporte público: algunas toman dos colectivos para llegar a sus lugares de trabajo.
“Nadie nos consultó”, aseguró Ana Díaz, titular de “Unidas podemos lograrlo”. “Esto nos complica porque muchas compañeras entran antes de las 8 o a las 8 para acompañar a los hijos de los empleadores a la escuela”, manifestó.
Díaz consideró que el COE podría autorizar a que viajen en esa franja horaria las personas que el año pasado estaban exceptuadas del ASPO (Aislamiento Social, Preventivo Obligatorio) para el cuidado de otras personas: “Nuestra preocupación son los niños”.
La mujer cuestionó que desde la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMT) señalaran en los medios que “lo único” que pueden hacer es apelar a los empleadores para que autoricen a sus empleados a entrar una hora más tarde.
“Es como mandarnos con una mano adelante y otra atrás”, calificó Díaz y solicitó a la Secretaría de Trabajo que tome alguna medida para que todos los trabajadores que tienen este problema puedan justificar su llegada tarde.
“Apelamos a los empleadores que nos autoricen a llegar más tarde y recuperar las horas después o, si entramos antes, a salir antes”, manifestó.

El comercio, a favor

Desde de la Cámara de Comercio indicaron que cada comerciante se organizará con sus empleados para cubrir la franja horaria en la que trabajan. Así, podrían ingresar primero quienes viven cerca o tienen movilidad propia y, luego de las 9, quienes se mueven en transporte público.
Según el presidente de la institución, Daniel Betzel, desde el Sindicato de Empleados de Comercio estuvieron de acuerdo.