Don Oscar René Ochoa es chapista de profesión y tiene una profunda vocación por el arte, especialmente por la pintura. Es autodidacta y desde muy pequeño se volcó de lleno a plasmar colores y formas en el lienzo.

Es un hombre criado en el campo, que respeta las tradiciones. En sus obras, a las que se dedica en sus tiempos libres, no deja de representar la tierra que ama, su flora y su fauna, los paisajes en los que transcurrieron sus 70 años de vida. Precisamente sus trabajos son expuestos en el salón municipal Martín Miguel de Güemes, de la localidad de Vaqueros.

"La muestra se extenderá hasta el día 20 del corriente y puede ser visitada por el público de 7 a 13. La gente va a disfrutar de 14 obras en acrílico y óleo, de los bellos paisajes vaquereños, de sus árboles, animales y de todo aquello que representa el pueblo y la región", contó Claudia Pastrana Méndez, secretaria de Cultura de la localidad.

Don Ochoa vive en Las Vertientes, zona alta de Vaqueros, cerca del cementerio. Ahora que está pronto a jubilarse, anticipó que piensa volcarse de lleno a la pintura.

El artista salteño piensa que todavía queda mucho por aprender y, a la vez, mucho por volcar en quienes admiran sus obras y en quienes quieren comenzar a introducirse en el mundo de las artes.

"En sus cuadros don Ochoa eternizó lugares muy queridos y típicos de este lugar, como "Camino a los Yacones", la zona alta, entre muchos otros. Cuando vemos sus pinturas indefectiblemente nos trasladamos a nuestra infancia, nuestra juventud, nos trae recuerdos de momentos que marcaron de alguna manera nuestras vidas", detalló Pastrana Méndez.

Las obras

Entre las obras expuestas se encuentran "El Campeón", "El pescador en el remanso", "La luna", "Atardecer azul", "La laguna", "La laguna de las pavas", "Los patitos de la laguna", "Crepúsculo", "Al galope", "La casita de mis viejos", "Messi" y "El 10".

En diálogo con El Tribuno, don Oscar Ochoa contó: "Ahora que tengo un poco más de tiempo me estoy dedicando más a la pintura. Uso técnicas mixtas y me aboco a los paisajes, a las zonas de quebradas. Me gustaba andar por donde hay agua. De chico era cazador y andaba mucho por el campo, los arroyos y lagunas".

El artista recordó que incursionó unos años en Bellas Artes, pero no terminó. Admite que le falta teoría, que lo suyo es autodidacta.

"Trabajo en acrílicos y óleos, aunque últimamente me dedico sobre todo al primero, por el costo que hoy tienen los óleos. Son muy caros, pero solvento este arte con el fruto de mi trabajo. Es algo que me llena de satisfacciones y con los que espero también alegrar el alma de los demás", concluyó don Ochoa.