Acceso web El Tribuno:
www.eltribuno.com
Contacto:
Editor: Pablo Juarez
E-mail: pjuarez@eltribuno.com.ar
Teléfono: +54 387 4246200
Por cualquier consulta administrativa o referida al sitio, puede escribirnos a: contactoweb@eltribuno.com.ar
Director: Sergio Romero
Telefono: +54 0810 888 2582
Razón Social: Horizontes On Line SA.
Registro de propiedad intelectual: 69686832Domicilio: Av. Ex. Combatientes de Malvinas 3890 - CP (A4412BYA) Salta, Argentina.
Nicolás Dapena, experto en seguridad, armas y terrorismo.
9 DE Marzo 2023 - 02:48
El experto salteño fue subsecretario de Lucha contra el Narcotráfico hasta 2015. Luego trabajó para la ONU en la misión contra el tráfico de armas en Yemen. Ahora asesora al Gobierno de Uruguay sobre el control de armas biológicas. Desde su experiencia está convencido que luchar contra el narcotráfico requiere un plan a largo plazo, que incluya no solo el combate en el terreno sino también del dinero que mueve ese delito, lo que involucra tanto al comprador como a quienes lo introducen en el sistema legal.
¿Cómo ve la situación y las medidas que tomó el Gobierno nacional en Rosario frente a la violencia narco?
La situación fáctica es mala, es evidentemente caótica. Hace varios gobiernos que viene creciendo el problema de la criminalidad vinculada con el narcotráfico en Rosario. No creo que sea ni el actual gobernador ni el anterior, sino que han sido muchos años. Han habido varios planes. Recuerdo en el 2014 que el secretario (de Seguridad de Nación, Sergio) Berni hizo un operativo saturación medio cinematográfico en Rosario, pero luego no hubo una política de toma de control de los lugares que había logrado dominar. Mi visión sobre el narcotráfico en Rosario es que es muchísimo más profundo y complejo. No puede ser que tenga semejante nivel de desarrollo sin una estructura de lavado de activos simétrica. Básicamente hay muchísima gente que vive del narcotráfico en Rosario, no solo los que venden. Los que lavan el dinero del estupefaciente, los que hacen entrar ese dinero al sistema legítimo, los que generan inversiones como si fueran fondos de origen lícito... Hay una gran estructura subterránea, diría así, que vive del narcotráfico, y ahí se empieza a pensar qué complicidades y connivencia hay por parte de periodistas, políticos, jueces, fiscales, etc. ¡Cómo puede ser tan grande la estructura del narcotráfico y tan invencible que planes tras planes nunca ceden!
Pero ¿han sido planes o "parches"?
Mire, la primera pregunta que haría es: ¿Santa Fe adhirió a la ley de desfederalización de lucha contra el narcotráfico? Es una ley -intervine en su redacción en el Senado- que modificaba un artículo de la Ley 23.737 y le atribuía competencia a las jurisdicciones provinciales para enfrentar el narcomenudeo. Segundo, la planificación es una conversión del terreno, es decir usted puede avanzar -voy a ser muy gráfico- con helicópteros y tanques si quiere. Puede voltear cien búnkers, pero mañana la misma gente que compraba en el búnker de la calle Güemes al 100 va a ir a comprar en el de la calle Güemes al 150, al lado del que volteó. La demanda va a seguir existiendo y la venta, por lógica, seguirá. El problema es la demanda.
Eso cambia el eje...
En la Argentina se habla mucho de la lucha contra el narcotráfico, pero como el enfrentamiento violento contra el narcotráficante. Eso, cuando usted lo analiza seriamente, es un poco circense, es un poco lo que hacía (la exministra de Seguridad de la Nación, Patricia) Bullrich: grandes operativos, con fotos, gente encapuchadas, etc. Acá lo que hay que hacer es ir más profundo. Hay que ir contra quienes manejan los recursos del narcotráfico, que son los lavadores de activos. Y hay que ir sobre los que compran estupefacientes, que son los que proveen el dinero a la maquinaria del narcotráfico. No es solo voltear un búnker y sacarse una foto para sentirse un cabo de la DEA. Se trata de encarar tanto al que le provee el dinero al narcotráfico, que es el consumidor, como al lavador del dinero del narcotráfico, que son estudios jurídicos, desarrolladores inmobiliarios, estudios contables, etc.
Se trata de encarar al que le provee el dinero, el consumidor como al lavador, que son estudios jurídicos, desarrolladores inmobiliarios.
¿Cómo se hace un plan de ese nivel? El lavado involucra una red social, de poder. Y la adicción es compleja de tratar.
Usted tiene toda la razón del mundo con la primera aseveración, pero me tomo la libertad de disentir con la segunda. De mi experiencia, de haber sido subsecretario de Lucha contra el Narcotráfico, la mayor cantidad de consumidores no son adictos en el sentido de que necesitan ser recuperados. Son gente que el lunes va a trabajar, que tiene estudios, está casado, tiene hijos, tiene trabajo estable y compra estupefacientes el sábado a la noche, el viernes a la noche y lo consume en un asado, en una fiesta, etc. No es el adicto que debe ser recuperado por el sistema de salud. Es un consumidor social y son la gran mayoría, porque todos los meses tienen ingresos legítimos. Son consumidores que alimentan un aparato que luego piden que se combata. Hay que tratar de quitar esa hipocresía. Hay que lograr que se haga un link que aquella persona que en un asado saca un porro o que en una fiesta saca un papel de cocaína o una pastilla de estupefaciente sintético, esa pastilla, ese porro o ese raviol es una bala que él le pagó al narcotráficante, y es una bala perdida que le puede pegar a él en un enfrentamiento con la policía en un allanamiento mientras él está pasando a 200 metros. Hasta que no se entienda que son los adictos sociales los que financian y sostienen el narcotráfico, y que son estructuras reconocidas las que lavan el dinero del narcotráfico, van a seguir siendo operativos cinematográficos irrelevantes.
¿Cree que eso puede suceder Rosario ahora?
Tres mil gendarmes es una cantidad suficiente. Pero, pongamos que logren desplazar de determinados lugares físicos a la oferta, ¿por cuánto tiempo van a lograr mantener ese lugar bajo el control de la autoridad?, ¿cuánto van a tardar en replegar esos 3.000 gendarmes que tienen que volver a su lugar normal, que es la defensa de la frontera?, ¿cuál es el plan después de la película de Hollywood? Eso es lo que falta. Y una vez que usted hizo todos los allanamientos, reunió toda la evidencia, hace la investigación, hace inteligencia criminal, cuánto va a tardar en identificar, llevar a juicio y condenar a los que lavaron activos, porque es tan grave el volumen del narcotráfico ahí que tiene que haber mucha gente lavando activos, y yo no veo condenas por lavado de activos.
¿Qué le parece que Diputados acelera la ley para fortalecer la justicia en Santa Fe con más fiscalías y juzgados?
¡Bienvenido sea! Ahora, le hago la pregunta inversa: ¿qué le parece que hayan demorado tanto tiempo eso? ¿Quién lo demoró? La estructura de lavado de activos que se beneficia con eso ¡Basta de hipocresía! Es la sociedad la que financia los estupefacientes y es la sociedad la que lava activos de los estupefacientes.
¿Habla del involucramiento de la política, la justicia y otros sectores sociales con los narcos?
Es público y notorio. Lo conocen en muchísimas jurisdicciones: jueces, fiscales y políticos que protegen a narcotraficantes, desarrolladores inmobiliarios que lavan dinero de narcotraficantes, periodistas que están financiados por narcotraficantes para atacar a funcionarios que se enfrentan a narcotraficantes.
De nuevo, ¿cómo se hace para desentrañar semejante entramado?
No trabajo en Argentina desde 2015. Desde mi experiencia y de otros países en Latinoamérica, lo primero es cortar el flujo de recursos al narco. Para eso tienen que atacar a los compradores. Al chico que compra una pastilla en el boliche, al abogado que compra cocaína para compartir en un asado el viernes a la noche con sus compañeros de fútbol o de golf, etc. Cuando usted logra cortar ese flujo de recursos empiezan a aparecer todos aquellos que se veían beneficiados por ese flujo.
Pero aquí vamos a la inversa con la despenalización del consumo...
La tenencia es totalmente irrelevante porque está precedida por un delito. Para que usted tenga estupefaciente, o lo produjo o lo compró. En ambos casos tiene hasta 14 años de pena por la aplicación del artículo 5 de la Ley 23.737. Esa es otra de las hipocresías en Argentina. Discuten la tenencia, pero el estupefaciente no aparece por la Inmaculada Concepción de la Virgen.