"Monseñor (Mario) Cargnello cobró en diciembre 48 mil pesos. No sé de dónde se están sacando algunas cifras", aclaró el sacerdote y vocero de la Iglesia Católica local, Oscar Ossola. Aseguró que eso cobró como última percepción que disminuyó progresivamente. Mientras que en las iglesias de frontera recibieron como último aporte alrededor de $7 mil y $4.500 los seminaristas. "Apenas si fueron diez", afirmó Ossola.

El sacerdote se refirió así a la decisión de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) que comunicó el martes que concluyó el "proceso de renuncia de los arzobispos, obispos diocesanos y obispos auxiliares" a los fondos previstos en la ley 21.950, por lo cual esas autoridades de la Iglesia católica dejarán de percibir los aportes del Estado nacional. En Salta aseguran que podrán solventarse y destacaron el aporte de los fieles. Indicaron que los fondos "no eran de importancia para las arcas eclesiales".

El cura Ossola, en tanto, remarcó que la renuncia era voluntaria" y "necesaria", y recordó que cuando Marcos Peña (entonces jefe de Gabinete) salió a informar el aporte estatal (en 2018), "lo que recibía la iglesia era 0,003 del presupuesto nacional. Era una cifra por donde se la mire ínfima".

Destacó la generosidad de los fieles

Luego de la renuncia, los altos mandos de la iglesia del país dieron a conocer que lanzaban el programa FE (Financiamiento Eclesial). Ossola explicó que mediante el programa se dieron a conocer las actividades benéficas de la Iglesia. Aunque aseguró que el financiamiento mediante el programa tampoco "desvela" y destacó la generosidad de los fieles.

Sin embargo pidió "más conciencia" de parte de los fieles que "son los que van a los templos a comulgar, a confesarse y no se les pide un peso, cuando muchas veces hacemos de psicólogos". "También los catequistas que a veces llegan a ser 50 personas que se preparan y trabajan de manera voluntaria" , detalló el sacerdote sobre las actividades que no son remuneradas pero que si "generan gastos". Sobre la canasta de la ofrenda , el cura advirtió que "es voluntaria" y diferenció a la Iglesia Católica de las evangelistas que cobran diezmos: "No llegan a ser diezmos pero los fieles son muy generosos"; precisó.

Entre las diferentes ramas que solo se sostienen con aporte de los fieles, señaló el cura, están las actividades de Cáritas.

En cuanto a las parroquias de frontera que percibían ayuda estatal, Ossola indicó que de las 80 parroquias que tiene la arquidiócesis en Salta, solo es de frontera la de San Antonio de los Cobres y "alguna otra porque se amplió a zonas más carenciadas". Pero, insistió e que " no era una cifra que incidiera, por eso fue un gesto de decencia y solidaridad y de realismo decir que esta ayuda es tan pequeña. No fue un tema de fondo", aseguró.

Los aportes del Estado

Los aportes estatales que recibía la Iglesia por la ley 21950- aprobada durante la presidencia de facto de Jorge Videla-, ordenaba que los arzobispos y obispos percibieran el 80% del sueldo de un Juez Nacional de Primera Instancia.

Según un informe de ACIJ (Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia) hace un año y medio (a agosto del 2022) un juez de dicho fuero e instancia cobraba alrededor de 722 mil pesos.

Mientras se defendía el aporte estatal amparándose en la Constitución Nacional que indica que "el gobierno federal sostiene el culto católico apostólico romano"; en 2018 la voz de "separación de Iglesia y Estado" se hizo más fuerte . Fue así que la Conferencia Episcopal llamó a votación y los obispos y arzobispos del país decidieron renunciar a los fondos públicos. La renuncia se hizo de manera progresiva durante cinco años, hasta diciembre de 2023.