El grueso de la columna de peregrinos se movilizó durante la noche del sábado. En la madrugada y en las primeras horas de la mañana de hoy, cuando la térmica rozaba a los 0ºC, las rutas 68 y 21 permanecieron prácticamente vacías. Lo que sí se notó fue la presencia de efectivos de la Policía de Salta que participan del operativo de seguridad.

En los últimos años se notó una fuerte disminución de los peregrinos de la ciudad de Salta que se dirigen a pie hasta el santuario del Señor de Sumalao, ubicado en la zona rural de La Merced. Sin embargo, el caudal de devotos que llegan hasta allí para agradecer, pedir o cumplir una promesa se mantiene. Muchos se trasladan en transporte público o en vehículos particulares. La gente que camina hasta el lugar suele ser de las localidades más cercanas.

“La fe y la devoción no disminuyen, lo que puede ser es que las nuevas generaciones ya no tienen la tradición de caminar desde la ciudad de Salta hasta Sumalao. No sé si será el frío, porque en otras décadas era aún más crudo, se daban las típicas heladas de mayo. Lo que creo es que se va perdiendo de a poco la costumbre de peregrinar caminando”, contó Marta, una vecina de Cerrillos.

Otros señalaron que la gente tiene miedo a enfermarse y la exposición al frío durante la noche es una buena razón.

Lo cierto es que la postal con los peregrinos en las rutas salteñas ha cambiado, pero la fe en el Señor de Sumalao es la misma y la esperanza en su santa protección, es aún mayor.