El viernes 16 de agosto, un grupo de estudiantes en la escuela Sarmiento comenzó a experimentar síntomas preocupantes como mareos, cefaleas y náuseas. "Nuestra principal preocupación es la salud de los chicos, de los docentes y del personal de la escuela", afirmó la ministra de Educación de la Provincia, Cristina Fiore. Dijo que ante esta situación, el SAMEC fue llamado de inmediato y se realizó una intervención inicial para determinar la causa de los síntomas.

Se sospechó de una posible intoxicación, por lo que el área de Bromatología de la Municipalidad de Salta intervino para investigar la naturaleza del problema. Al mismo tiempo, el área de Infraestructura revisó los sistemas de calefacción de la escuela, encontrando que el único aparato de calefacción y cocina estaba en condiciones herméticas que no permitían fugas de gas.

Sin embargo, GASNOR, la empresa de gas, realizó estudios y no detectó monóxido de carbono en el ambiente: “Los análisis de laboratorio indicaron presencia en la sangre de monóxido de carbono. Honestamente, esta contradicción entre un estudio y otro, a nosotros nos tenía un poco desconcertados, por lo cual volvimos hacer una serie de inspecciones en la escuela para detectar qué es lo que podría haber pasado”, indicó la ministra.

Recordó que para asegurar la tranquilidad de los padres y alumnos, ayer se realizó una fumigación en el establecimiento motivo por el cual no hubo clases.

En tanto, Fiore detalló que hoy, a las 8, se realizó una reunión en la escuela con Salud Pública, Educación y los padres. “Se habló con los padres y docentes, se contó que íbamos a poner un aparato para detección de monóxido de carbono, de un plan de trabajo de 30 días de seguimiento, y todos pudieron evacuar las dudas y consultas que tenían”, señaló. 

Luego, tras el nuevo caos vivido al mediodía, Fiore señaló que se hicieron nuevas mediciones de monóxido de carbono con equipos especializados, y se constató que los niveles en la escuela eran cero. Sin embargo, para prevenir futuros problemas, Fiore anunció que se llevaría a cabo una revisión exhaustiva de la escuela y de los negocios circundantes para detectar posibles fugas de gas.

Con la intención de continuar con la educación sin comprometer la seguridad, se decidió implementar clases virtuales durante el tiempo que dure la investigación y el seguimiento de la situación. Además, la ministra subrayó la importancia del apoyo psicológico, anunciando la intervención del Programa de Orientación Escolar (POE) para proporcionar contención emocional a los estudiantes afectados y a sus familias.

"La salud y la seguridad de los alumnos y del personal son nuestra prioridad”, concluyó Fiore.

La funcionaria provincial destacó que las medidas tomadas buscan no solo resolver el problema inmediato, sino también asegurar que no se repita en el futuro.

Respecto a una persona adulta que también resultó afectada hoy, la ministra dijo: “Están viendo el tema de una ordenanza, hay que hacerle los análisis de sangre porque a veces frente a esta situación la gente se preocupa y esa preocupación puede generar este tipo de cosas, pero hay que ver si tienen o no monóxido de carbono en la sangre”.

Preocupación de los padres

"La historia no es nueva. Hace dos semanas también nos llamaron urgente a los papás porque que los chicos estaban descompuestos, algunos estaban desmayados. Todos nos vinimos, las ambulancias, los bomberos, la policía, todo. Dejamos que actúen lo que saben de esto, y bueno, esperando una respuesta, salieron en los medios, incluso la ministra de Educación diciendo que esto fue por ingesta de alimentos y no por inhalación (de monóxido)", expresó Judith, madre de uno de los estudiantes afectados.

El viernes 16 de agosto, una veintena de chicos estaban descompuestos y también actuó el Samec. Un grupo estuvo internado en el Hospital Materno Infantil. Se habló de malestar por ingesta de alimentos y también por síntomas de intoxicación con monóxido de carbono.

Desde aquel momento, un grupo de padres resolvió no enviar a los chicos a la escuela, hasta que se resuelva la situación, ya que la duda sobre una posible pérdida de gas estaba latente. "Resolvimos que vuelvan este lunes a clases porque la docente ya había comenzado a dar tareas a los pocos chicos que venían y pasa todo de nuevo", expresó una madre a Radio Salta.

Y agregó: "Nos dijeron que habían cortado el gas, que estaban dadas las condiciones. No se puede imaginar el dolor que uno tiene una como mamá de ver los compañeritos de mi hija, que se van en una ambulancia".

En el caso de Judith, su hija va a séptimo. Las aulas de estos estudiantes se ubica en el primer piso de la escuela Sarmiento, arriba de la cocina, por lo que tiene sospechas.