Entre enero y agosto de este año en Salta se realizaron más de 5.700 traslados por motivos médicos (incluyendo turnos programados, derivaciones médicas y oficios judiciales) de presos de las unidades carcelarias de Capital, Cerrillos y Rosario de Lerma hacia distintos hospitales públicos. Se atendieron aproximadamente 23 pacientes por día.

Una situación inquietante, tensa. Por lo cual funcionarios de la Provincia evaluaron la importancia de trabajar en alternativas para que las personas en contexto de encierro con patologías específicas, que no revistan gravedad, sean asistidas en las unidades carcelarias sin la necesidad de ser trasladadas a los hospitales. Se propuso la implementación de herramientas tecnológicas como la telemedicina y la asistencia de personal médico penitenciario.

Así, el gerente del hospital San Bernardo, Pablo Salomón, se reunió con el ministro de Seguridad de la Provincia, Marcelo Domínguez, para abordar la atención médica de internos de alta peligrosidad y la posibilidad de implementar la telemedicina en el sistema penitenciario. El tema principal giró en torno a un caso reciente que puso de manifiesto las dificultades y los riesgos que implica el traslado de internos complejos a centros médicos.

"El punto inicial fue que semanas anteriores tuvimos un preso muy complejo, de alta seguridad con probabilidades de fuga", indicó Salomón, al referirse a un recluso que debió ser internado por una hipopotasemia severa. El desafío, según mencionó, era garantizar la seguridad del traslado de este tipo de pacientes, un proceso que puede implicar un alto riesgo tanto para los agentes de seguridad como para el público.

En este contexto, el gerente del hospital más importante de la región subrayó la importancia de utilizar la tecnología para evitar traslados innecesarios. "Sería muy conveniente probablemente evitar los traslados y comenzar a aportarle tecnología al sistema", dijo, refiriéndose al potencial de la telemedicina. El gerente destacó que ya se están dando pasos en esta dirección, con la telemedicina permitiendo que médicos clínicos de los servicios penitenciarios puedan trabajar en conjunto con especialistas a distancia. "De un lado tenés el profesional súper especialista y del otro lado un médico clínico sin alguna especialidad compleja, que en muchos de estos casos requiere", agregó.

Pablo Salomón también recordó su experiencia como jefe de emergencias y comentó que muchos internos de alta seguridad intentan manipular el sistema de atención médica. "Muchas veces con el solo hecho de querer salir, ver la luz, la calle, se inventan síntomas", dijo, lo que genera traslados innecesarios y gastos de recursos. La implementación de la telemedicina, según el médico, no solo optimizaría los recursos, sino que también aumentaría la seguridad: "Brindamos mayor seguridad a toda la población salteña, optimizamos recursos, disminuimos gastos y somos eficientes y eficaces en la atención de estos pacientes".

Con respecto a la atención médica en el hospital, el gerente mencionó que entre enero y agosto de este año se atendieron alrededor de 5.700 pacientes. Esto, sumado a los traslados de internos, genera un gasto considerable, lo que refuerza la necesidad de buscar soluciones innovadoras. "El gasto es interesante, el riesgo no es menor", señaló.

Salomón informó que recorrerá próximamente junto a las autoridades del Ministerio de Seguridad y Justicia las instalaciones del Penal de Villa Las Rosas a fin de aunar criterios, recursos y evaluar las opciones adecuadas para tal fin. A su vez, aclaró que esta iniciativa sería para casos sanitarios menores que no requieran una intervención de alta complejidad.